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Controversia en F1: Suspiciones sobre el sistema de ajuste de altura de Red Bull

El debate sobre el sistema de ajuste de altura de Red Bull sigue generando controversia, con declaraciones que aseguran su legalidad y transparencia.

“Es una herramienta sencilla cuando las piezas están desmontadas. Pero una vez el coche está construido no se puede tocar”

Max Verstappen

Max Verstappen defendió la posición del equipo, señalando que “no hay nada que esconder”. Según él, el sistema es totalmente visible y accesible para todos. Agregó que “una vez el coche está montado, no se puede modificar”, descartando cualquier sugerencia de manipulación.

Lewis Hamilton, sin embargo, es escéptico y lanzó una contundente crítica: “sabe Dios cuántos años lo llevan usando y ganando títulos”. Esta provocación fue respondida por Zak Brown, jefe de McLaren, quien cuestionó la necesidad de ciertos diseños del coche de Red Bull.

“Es curioso cómo se argumenta que no se puede tocar algo que ya está completamente ensamblado. La FIA no sellaría un componente a menos que pudiera ser manipulado”, dijo Brown, planteando dudas sobre la legalidad del sistema.

“¿Por qué lo diseñaron para que estuviera dentro del coche, cuando los otros nueve equipos no lo han hecho?”

Zak Brown

Brown también indicó que cualquier manipulación del coche durante el parque cerrado sería una infracción grave según las reglas de la F1. “Si hay alguna evidencia de una manipulación, la FIA necesita investigar a fondo”, advirtió.

La importancia de la transparencia en este asunto no puede subestimarse. “Hablo con otros jefes de equipo que también tienen preguntas pendientes”, comentó Brown, sugiriendo que la investigación continúa.

Toni Cuquerella, por su parte, también compartió su perspectiva en DAZN: “No estoy seguro si todos los equipos tienen un sistema así, pero hay dudas sobre su uso legítimo. Aunque uno pueda tener un componente ilegal, es necesario demostrar que realmente fue utilizado”.

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