Hasta cinco aficionados del Atlético de Madrid podrían enfrentar sanciones severas, mientras que otros quince están bajo investigación. Aquellos que han sido identificados, se les prohibiría ingresar a los recintos deportivos y enfrentarían una multa de 6.000 euros por los incidentes ocurridos el pasado 29 de septiembre de 2024, durante el partido contra el Real Madrid. Esta propuesta ha sido presentada por la Comisión Permanente de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte.
La Comisión ha revisado los incidentes donde se reportó que se “arrojaran objetos al campo” y se lanzaron “graves insultos hacia los jugadores del equipo visitante” durante el partido Atlético de Madrid – Real Madrid. Aún están “analizando la información e imágenes recopiladas para propuestas adicionales”, ya que podría haber implicaciones para al menos quince aficionados más.
Además, se ha propuesto una sanción menor para un aficionado que “arrojó un objeto al campo“, quien podría enfrentarse a una multa de 3.001 euros y una prohibición de acceso a estadios por seis meses.
Incidentes en el Real Madrid – FC Barcelona bajo investigación
En relación a este tema, la Comisión Permanente también ha informado sobre los incidentes ocurridos este sábado en el estadio Santiago Bernabéu durante el enfrentamiento entre el Real Madrid y el FC Barcelona. En este partido, se registraron actos de racismo hacia jugadores como Lamine Yamal, Raphinha y Ansu Fati, sobre los cuales han expresado su “firme condena”.
El choque entre el Real Madrid y el FC Barcelona ha llevado a que la Comisión inicie una revisión de vídeos e imágenes para determinar responsabilidades. Están evaluando las grabaciones de no solo los incidentes durante la celebración de un gol, sino también de “los insultos dirigidos a los jugadores del equipo visitante durante el calentamiento“, según se informa en un comunicado.
Conclusión: Un llamado a la tolerancia en el deporte
Estos acontecimientos subrayan la necesidad urgente de abordar la violencia y el racismo en el deporte, promoviendo un ambiente de respeto y deportividad. Las sanciones propuestas son un paso hacia la creación de un entorno más seguro tanto para los jugadores como para los aficionados. El deporte debe ser un espacio de unión y no de división.