El oviedismo celebra una emocionante noticia en menos de 48 horas: tras la brillante victoria frente al Éibar, hoy se anuncia la renovación de Oier Luengo por tres años más, hasta el 30 de junio de 2027. Este defensor vasco ha demostrado su valía y ha ganado el respeto y cariño de la afición con su esfuerzo en el campo en las últimas temporadas.

Luengo llegó al Oviedo en el verano de 2022. En aquel entonces, Tito Blanco era el director deportivo del equipo y decidieron fichar a un central que llegaba tras un descenso con el Amorebieta. Su llegada fue poco comentada y la temporada no fue fácil para él. Con Jon Pérez Bolo y luego con Álvaro Cervera, el vizcaíno no logró afianzarse, participando en apenas once partidos debido a la competencia con Costas, Calvo y Tarín.

Todo cambió el año pasado cuando se convirtió en una figura indispensable. Las lesiones de Lucas, Mario Hernández, Tarín y David Costas le brindaron la oportunidad de ser titular, tanto como lateral derecho como en el centro de la defensa. Sus estadísticas fueron impresionantes: jugó 42 partidos acumulando 3,558 minutos, 36 de ellos en Liga, y anotó dos goles, contra el Levante y el Espanyol. Además, fue titular en los cuatro encuentros del ‘playoff’ de ascenso a Primera y asistió a Alemao en el primer gol en la final de ida ante los pericos. Completó su año favorable con dos partidos de Copa y solo estuvo fuera dos semanas por una molestia muscular, además de perder un encuentro por sanción debido a sus seis tarjetas amarillas.

La renovación de Luengo es parte del ambicioso plan del Oviedo para asegurar la continuidad de jugadores clave en su plantilla, que además se ajustan al perfil salarial del club. El próximo en sentarse a negociar su continuidad podría ser Sebas Moyano, cuyo contrato vence al final de esta temporada.